A finales de los años 80, en el Ebro se empezaron a experimentar sistemas de control en continuo de la calidad, con envio de información en tiempo real a un rudimentario centro de control. Se trataba de experiencias piloto desarrolladas con recursos muy limitados. Se instaló una estación de control en continuo con medida de pocos parámetros en el río Ebro a la altura de Zaragoza.
Más adelante se instalaron dos estaciones para seguimiento de la evolución de la salinidad, en puntos que en aquellos momentos requerían especial atención (Río Elorz en Pamplona y Río Ebro en Cabañas).
En 1990, con el desarrollo del proyecto SAIH (sistema automático de información hidrológica), se implantaron 6 estaciones de calidad, comunicando vía radio, a través de una red propia y con tecnología analítica más avanzada.
En 1993, el proyecto SAICA (sistema automático de información de calidad de las aguas) comenzó a trabajar en la implantación de una red de estaciones de alerta de calidad a nivel nacional.
Las estaciones se implantaron en dos fases (SAICA I: 1993 y SAICA II:1995). En la primera fase se construyeron 13 nuevas estaciones de control. En la segunda se implantaron 9 nuevas estaciones, y se adaptaron a las nuevas tecnologías las 8 anteriormente existentes (2 de control de salinidad y 6 de proyecto SAIH).
En el año 2009 se inició la instalación de sistemas de control en embalses. La primera sonda fue instalada en la presa de Cueva Foradada. A finales del mismo año empezó a funcionar la segunda, en La Tranquera. En el año 2012 se instaló una tercera, en el embalse de La Loteta.
En el año 2012, en el marco del proyecto RIADE (Red de Indicadores Ambientales del Delta del Ebro), se inició la instalación de un sistema de control en el bajo Ebro y zona del Delta, para realizar el seguimiento de los caudales y de la calidad de las aguas, en río, canales, lagunas y humedales.
La información procedente de las instalaciones implantadas es gestionada por la Confederación Hidrográfica del Ebro, que después sirve los datos al resto de los organismos implicados en el proyecto.
Las instalaciones que reciben datos de calidad de aguas son recibidas a través del sistema SAICA, y se pueden consultar en esta página web.
De forma adicional, se han integrado parcialmente en el sistema estaciones que son propiedad de otros organismos (3 de la Agencia Catalana del Agua, 8 del Gobierno de Navarra, y 1 de la empresa PEUSA). Estas estaciones, que realizan control de aguas de la cuenca del Ebro, son propiedad de los distintos organismos, y son éstos los encargados del mantenimiento. Los datos llegan al sistema SAICA por distintos modos, y sus tendencias son revisadas diariamente en búsqueda de posibles incidencias de calidad.
Todas estas instalaciones, con posterioridad a su implantación y puesta en marcha, requieren de unas tareas de mantenimiento periódicas que aseguren el correcto funcionamiento y la exactitud de las medidas recibidas.
El número de estaciones activas es variable, y depende tanto de la evolución de las necesidades concretas de seguimiento, como de la disponibilidad de presupuesto.